Antes de declarar el levantamiento de la inmunidad parlamentaria de Taina González, y aceptar la renuncia de Jeycar Pérez, el presidente de la Asamblea Nacional (AN), diputado Jorge Rodríguez, pidió al Plenario levantar las manos para votar en contra de quienes llamó delincuentes y traidoras. "Que se las trague la historia", expresó indignado.
Visiblemente enojado por la actuación de González, el diputado dijo que estaba asqueado. Indicó que hay una indignación que no se puede ocultar y que debe ser escudriñada con el pueblo. "Hay traiciones que no se pueden justificar, traiciones al juramento de la patria, traición a la memoria de Hugo Chávez, traición a los diputados, a los compañeros, hay traiciones que no se pueden perdonar", recalcó.
Dijo que Nicolás Maduro, junto al pueblo, derrotó las pretensiones del imperio, por lo que le ha puesto un precio a su cabeza para que un sicario diera al traste con la vida del presidente.
Añadió que ojalá haya suficiente justicia en los códigos penales para este tipo de atentado contra la palabra, contra el pueblo. Apuntó que por un puñado de dólares se aliaron con los mismos que han intentado asesinar al presidente Maduro. " Por un puñado de dólares traicionaron a sus padres, a sus hermanos y traicionaron a su patria, pusieron en riesgo a todos en la AN", precisó.
Agregó que si alguien se desvía los demás no deben hacerse la vista gorda, ni los locos. "Una traidora, que me da asco pronunciar su nombre, se paseaba en una camioneta, y nadie vio eso", se preguntó el parlamentario. Igual ocurrió con un alcalde de oriente, que no fue visto por nadie.
Se dirigió a los diputados diciéndoles que ser parlamentario es un apostolado, que hay que renunciar a los amigos, a los placeres impuestos por el capitalismo. Destacó que la traición siempre empieza por el billete. "Los traidores que están en el exterior que buscan acabar con la revolución comenzaron robando y fueron presa fácil del imperialismo", esgrimió molesto.
Jorge Rodríguez dijo que no puede ocultar el dolor que le produce la traición y alertó que si algún diputado se desvía del camino y del juramento ante la AN no necesitará
ningún brujo, ni alguien que le haga la carta astral para adivinar el futuro, lo que le espera es la cárcel. " Y si se meten debajo de las piedras, allá se buscarán".
También comentó que a los diputados se les acercan personas para alabarlos, "esa es la voz del diablo, la voz que te convierte en traidor". Les recordó que en la IV República los ricos no pagaba cana, tampoco los parlamentarios. Habló de jurar no traicionar la orientación de Maduro, de que caiga quien caiga no habrá piedra donde esconderse, ni ladrones, narcotraficantes, o corruptos, porque serán llevados a la cárcel.
Admitió que este hecho no será el último dolor y que han pasado por muchos. Hizo un llamado a las diputadas y diputados a levantarse, sacudirse la tierra de este hecho doloroso y seguir adelante y fiel. Reconoció que sin el legado de Hugo Chávez y sin la fortaleza de la lealtad a la Revolución Bolivariana ya se hubiera dado al traste con el proceso. Aseveró que la revolución se mantiene viva porque Chávez está siempre presente.
